Dasaraches
9 de Octavus, Año Libre 4
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Golem de Quitina |
Aprovechando que los monstruos y su titiritero no se percatan aún de su presencia Doro avanza a toda prisa insertando su espada mágica en la articulación de uno de los brazos del monstruo para intentar detener su ataque contra el desamparado semi elfo. Desde el suelo el mestizo se alza intentando convencer al sujeto llamado Barrach de que abandone el bando de Pharistes y acto seguido se yergue y lanza un poder psiónico que eleva en el aire y fuera de combate a uno de los golems para luego reposicionarse esquivando un ataque por sus protecciones mágicas y psiónicas.
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Barrach |
Barrach intenta, de forma altanera, utilizar el mismo poder en Mara, pero el semi elfo resiste el ataque psiónico. Mientras tanto Shardivan, el enano, lanza ataques psiónicos a Barrach, Coconan invoca a Fenixin que lo ayuda a arremeter contra el golem que quedaba combatiendo hasta destruirlo parte por parte. Doro avanza contra el enemigo lanzándole tierra en los ojos cegándolo para luego esconderse en la maleza tras él. Mara hace arder cinco proyectiles ígneos de forma psiónica y los dispara contra Barrach a lo que él responde haciendo un radar psiónico ubicando las mentes de algunos de sus enemigos. Sólo Mara y Doro logran mantener sus mentes ocultas, el resto son víctimas de una brutal onda psiónica dirigida directamente a sus mentes. Coconan, aún aturdido, avanza y lo tumba con su escudo para luego golpearlo con Condenadora un segundo antes de que Doro le abra la garganta con su espada de acero mágico.
Con la situación primaria bajo control la tensión no cesa. Doro y Coconan se muestran inquisitivos con los dos sujetos, Mara y Shardivan. Dicen ser de la Orden y explican la ruptura que sufrió. Doro no tarda en mencionar su intención de desactivar el Psionatrix por lo que Mara y Shardivan acceden rápidamente a que Hukaa les haga una lectura mental.
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Visiones de la Orden |
Hukaa logra penetrar en la mente de ambos y ver como Pharistes, Cerebro Maestro de la Telepatía, tomaba el control de la orden lo que comienza a generar una grieta en la secretista organización hasta el momento de visualizar la reunión con Korgunard donde los miembros reacios a seguir a Pharistes y sus ideas deciden no agredir al Avangión produciendo la división absoluta del grupo en psiónicos leales a Pharistes y los llamados renegados. Finalmente Mara explica que los renegados que se encontraban en Dasaraches se exiliaron al bosque hasta que lleguen más rebeldes y allegados a sumarse para un próximo ataque al que Coconan, Doro y Hukaa acceden a sumarse. Así son guiados a un campamento al sur de la fortaleza que se encuentra en una isla rodeada por un oscuro lago.
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Bosque silencioso |
El campamento parece inicialmente vacío, pero con el correr de las horas se va llenando de viajeros misteriosos de todas las razas. Al grupo se le advierte que sólo deben comunicarse telepáticamente ya que de otra manera serían descubiertos. Durante la noche comienza un debate mental sobre el curso a seguir en el campamento de rebeldes. La clarividente Tayra alega que sus visiones le hablan de muchísima muerte, mientras que Chk'tk'cha, el thri-kreen telépata dice que su gente muere de a miles, su vida no es nada en comparación a lo que se pierde si dejan a Pharistes salirse con la suya. Finalmente Priath, el Cerebro Maestro del psicometabolismo expone que Pharistes está llevando adelante una agenda personal por lo que, según las antiguas leyes de la Orden, su vida debía extinguirse.
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Preparando el ataque |
Decidido el futuro Pharistes definen cómo atacar. Varios irían volando, otros se teletransportarían y un último contingente cruzaría corriendo el largo puente directo a la entrada principal.
10 de Octavus, Año Libre 4
Comienza un nuevo día en el Silent Forest y Hukaa saluda al grupo, ella iría con los psiónicos que cruzarían volando. Antes de que salga el sol el grupo se acerca a hurtadillas hasta un extremo del puente esperando la señal mental. Cuando despuntan los primero rayos de luz una voz en sus mentes da la señal y comienzan a cruzar el puente con su grupo mientras otros psiónicos en distintos puntos se teletransportan y cruzan volando.
A mitad de camino en el puente los psiónicos son sacudidos mentalmente mientras los cristales que los protegen de los efectos del psionatrix se opacan quedando de nuevo expuestos a la totalidad de la supresión psiónica. Cuando logran incorporarse una enorme masa de agua aparece sobre el puente tirando a la mayoría al agua y un segundo después emerge del agua un enorme reptil de dimensiones descomunales tumbando a los restantes. Mara, Shardival, Doro y Coconan consumen rápidamente los gajos de la fruta de invisibilidad y la nube oscurecedora de Coconan que tenían preparadas para infiltrarse y así esquivan al lagarto mientras este vuelve al agua a devorar a los caídos.
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Dasaraches |
Corren a toda prisa hasta llegar al portón principal que se encontraba apenas abierto como para poder ingresar. Doro se asoma primero esquivando el cuerpo que yace en la puerta sólo para ver un rastro de sangre de otro muerto que estaba siendo halado por un kirre hacía el bosque interno. La bestia se pone nerviosa al oler a la halfling por lo que no duda y se lanza sobre la bestia con su espada presta. Seguido Shardivan y Mara lanzan ataques psiónicos matando al animal. Acceden a la sala contigua a la entrada donde accionan entre Coconan y Shardivan el mecanismo para abrir completamente la puerta principal para un próximo grupo de ataque o para huir más fácilmente si hiciese falta. Tras esto retoman camino directo a la ciudadela pasando por una fuente donde encuentran a Xaxachtel, un halfling leal a Pharistes muy mal herido. Mara lee sus pensamientos entendiendo que el halfling se encuentra cansado de combatir, que quiere volver al bosque y dejar todo atrás. Preguntan por lo que habrá adelante y el herido no duda en comentar que el Psionatrix está en la cima de la torre y que los psiónicos han estado despertando muertos vivos además de que varios elementales de aire vuela sobre el nivel del bosque. Con esto Doro tiene un acto de compasión con su congénere dándole una fruta sanadora y confirmándole que es tiempo de volver al bosque.
Atraviesan el resto del bosque hasta la entrada principal donde Coconan avanza primero al ser el único que aún se mantiene invisible. Allí ve cinco gigantes esqueletos armados tras los cuales se encuentran un enano armado y una mujer en armadura. Tras todo el grupo un enorme bajorrelieve que muestra a los antiguos magos preservadores que levantaron la fortaleza. Deciden consumir más frutas de invisibilidad dejando a Shardivan atrás. Pasan invisibles y se cuelan por una puerta trasera hasta llegar a un enorme comedor muy elegante.
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Escena desoladora |
Allí ven tres cadáveres de rebeldes y un efecto psiónico remanente afecta a Doro haciéndole sentir un gran pánico y la certeza de que moriría si se mantiene en el lugar. La halfling cierra la puerta antes de entrar y redirige al grupo hacía otra sala. La suerte no mejoraría y encuentran otra sala donde ven el cuerpo maltrecho de Ariach rodeado de tres enormes golems de obsidiana.
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Golem de Obsidiana |
Con la idea de cuidar sus recursos deciden aprovechar la invisibilidad y trepar las escaleras por un costado sin exponerse a los golems. Primero sube Doro y luego arroja una soga para Mara y Coconan. Llegan al nivel superior. Atraviesan un par de enorme puertas encontrando otra masacre y recuperando algunos objetos entre los que destacan un rústico mapa de la fortaleza que utilizarán para llegar rápidamente a la cima de la torre, además de un cetro de obsidiana y otro de plata. Antes de subir las siguientes escaleras se encuentran en la antigua y deteriorada biblioteca donde son detectados por los psiónicos leales a Pharistes.
Los psiónicos parecen detectar fácilmente a los invisibles héroes y les lanzan un discurso sobre la cantidad de mentes brillantes que habían muerto ese día. No querían derramar más sangre y pedían que se rindan. Sin embargo eso no estaba en la mente de los recién llegados. Mara ve similitud entre el cetro de este psiónico y el del enano que tenía cinco esqueletos gigantes así que intenta utilizar los cetros recuperados para dominar a los poderosos zombies juju lo que es interpretado por Doro que corre invisible a robar un cetro por la fuerza y revolearlo a Mara aún exponiéndose a quedar rodeada por todos los enemigos. Por fortuna Mara atrapa el cetro en el aire. Los zombies repiten al unisono que no pueden actuar contra el portador del Cetro de Shuvagaras. De esta manera los frustrados psiónicos aceptan ser derrotados y sin derramar una gota de sangre o sudor se retiran ante las amenazas.
Suben las escaleras hasta el último piso antes de la torre. Sólo Doro se había vuelto visible por el robo del cetro. Esta terraza estaba cubierta de cadáveres y antiguas estatuas semidestruidas, además de un golem de obsidiana con los puños manchados de sangre. Mara entiende, al no poder usar el cetro del correspondiente material, que el golem se encontraba defectuoso. Mientras analizan la situación ven a un elfo maltrecho que simulaba estar muerto correr a la puerta norte. A tal acto el golem se dirige hacía allí hasta perder de vista al elfo y quedarse en el lugar. El elfo, según Mara era Ferith, un rebelde. Aprovechando esto el grupo se escabulle por la entrada sur, lejos del golem. Dentro ven al elfo trabado en combate con Jerek, una mul guerrera leal a Pharistes. En vez de ayudar al elfo prefieren subir las escaleras y tomarlo como distracción.
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Pharistes, el Psionatrix y un templario dominado |
Suben rápidamente las escaleras hasta la cima donde encuentran una amplia sala rodeada de arcadas que dejan ver el bosque y las montañas alrededor. Delante, un retorcido trípode en el que flota el Psionatrix junto a Pharistes y los dos urikitas restantes. El líder de la orden desafía a los recién llegados y ordena a los urikitas que tiene dominados a atacar.