.

.

lunes, 5 de agosto de 2019

Dragon's Crown - Sesión 36 (03/08/2019)

Un extraño clérigo

4 de Fifthover, Año Libre 4
Con las criaturas muertas y Coconan sólo pudiendo respirar bajo el agua se sumerge en la violácea agua en busca de su escudo. Al no haber corriente y el punto de luz del pozo de Kivi una buena referencia, no tarda mucho en encontrarlo. 
Kivi, aún convertido en un gigantesco reptil acuático nada con Coconan en busca de una salida encontrando una playa al otro extremo de la cueva. Cuando el gladiador intenta salir del agua descubre una mucosidad sobre su piel que desaparece rápidamente al contacto con el aire que de repente parece quemar la piel de Coconan por lo que por el momento decide mantenerse bajo la superficie. Por su lado Kivi vuelve a la pasarela dónde esperaban Doro y Hukaa destranformándose al intentar subir. Acto que le hace recibir la misma quemadura por aire que a su compañero.
Imposibilitado de hablar con sus compañeros Kivi, desde bajo la pasarela, utiliza su magia para moldear la tierra de la misma intentando dar un mensaje a Hukaa, que le responde con mensajes directos a la mente del enano usando el Sendero.
Finalmente deciden alargar la pasarela hasta la playa para continuar, tarea que le lleva a Kivi un par de horas, suficiente para que él y Coconan vuelvan a la normalidad. Antes de continuar el druida se toma un tiempo para inspeccionar los cadáveres de las criaturas que aún flotan en las cercanías de la pasarela mientras Hukaa bebe todo el contenido de su bota y la carga con la violácea agua.


A pesar de que el enano utiliza su magia para sondear el terreno que los esperaba más adelante no es capaz de adivinar que una descomunal criatura anélida los seguía cientos de metros bajo sus pies. Mientras recorren los serpenteantes túneles una vibración en el suelo anticipa lo peor y un instante después el gigante gusado púrpura surge del suelo engullendo completamente a Coconan. No hay tiempo que perder, Kivi se transforma en un animal de tamaño comparable al del gusano, Hukaa, en un acto de desesperación, sacrifica su propia constitución física para recargar su mente de energía psiónica al tiempo que Doro desenfunda su espada mágica con la que ataca una y otra vez a la bestia. 
Sin ver ningún indicio de que el gladiador seguía luchando por su vida Kivi, transformado en simio gigante de roca y gemas, atrapa la boca del gusano con una mano e introduce la otra dentro del animal buscando a su compañero prestando especial atención en traer de vuelta tanto a Coconan como a Condenadora, su espada.
Hukaa intenta lanzar la bota con agua tóxica a la boca del gusano pero los movimientos caóticos del objetivo hacen de esta una tarea imposible y es Kivi quien toma la bota del suelo y vuelve a meter la mano en la boca del gusano, pero esta vez para introducir un veneno. Mientras tanto Doro estaría trepando a la bestia para tener una ventaja táctica y Hukaa utilizaba el sendero para volver a poner a Coconan en condiciones de combatir. Con el equipo otra vez entero la lluvia de ataques termina por liquidar al gusano.

Continúan por el único sendero disponible hasta llegar un antiguo templo dedicado a algún Lord Para-Elemental de Magma. Un río de magma separa las dos alas del templo, una dónde se encuentra el altar y la otra por dónde acaban de llegar. Kivi aprovecha que aún está transformado en la gigante bestia para lanzar a sus compañeros al otro lado y así poder avanzar. Pero al lanzar a Doro un extraño Clérigo se hace presente saliendo de detrás del altar, un semielfo que porta un escudo con una extraña gema ardiente en su centro. El extraño sujeto niega tener cualquier relación con el daño a las plantas en la superficie que preocupaba a Kivi y se muestra ansioso e insistente con que abandonen el recinto sagrado indicándoles incluso el rumbo hacia la superficie.
El sol ya se había ocultado y debían encontrar la caravana si querían dormir con algo en el estómago. El druida utiliza su bastón para preguntarle al espíritu del lugar la posición del inix más cercano esperando encontrar a Rocky, su compañero. Tras algunas horas logran dar con el campamento, comer algo a las apuradas y descansar.

5 de Fifthover, Año Libre 4
Ya es casi mediodía cuando comienzan la marcha otra vez y un poco pasada la hora de comer cuando Kivi siente una extraña vibración bajo ellos, pero al intentar determinar el origen expandiendo su sensibilidad con la piedra lo que sea que lo haya alertado ya no se encontraba ahí. Sin más avanzan hasta llegar al desierto de dunas. 
Logran divisar un campamento en el medio del desierto, completamente alejados de todo. Un campamento de elfos descubren al acercarse frontalmente. Son recibidos por dos docenas de elfos armados.