Más "dragones", y "magos", y "magos y dragones"
El combate termina con el dragón verde muerto y Neronvain atado. Un poco de magia de Aloun les permite interrogar al elfo, al hijo de Melandrach, el culto sigue robando tesoro para el ritual que traería a Tiamat de nuevo a este plano.
El bosque se vuelve a agitar, un semidragón azul montando a un dragón real de su mismo color sale del bosque junto a otro grupo de cultistas con arcos y flechas. Se desata el combate y los seguidores de Tiamat descargan sus proyectiles contra el príncipe elfo que pierde inmediatamente la vida.
Mientras Rosleaw intenta frenar la fuerza de choque Aloun utiliza sus nuevas alas de dragón y su magia para trasladar el combate por sobre las copas de los árboles. Su desgaste y la potencia de los rayos eléctricos del dragón y el semidragón le cuestan la consciencia a ambos héroes.
También les cuesta la máscara negra de Aloun. Los cultistas se retiran con el objeto legendario de su diosa. No se arriesgan a perder la máscara.
Frustrados y con el príncipe muerto deciden descansar en una cueva creada por Lem tras estabilizar a los caídos. A la mañana siguiente consiguen algo más de información con el hechizo de Rosleaw de "hablar con los muertos".
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| El semidragón que roba la máscara negra de Aloun |
Con un cadáver de príncipe y la amenaza del dragón verde terminada vuelven a Waterdeep. Delaan Winterhound los recibe en el camino, a las afueras de la ciudad del esplendor con su gran lobo. Deben transmitirle la información al consejo.
Un nuevo consejo urge y el grupo no tiene tiempo de descansar. El ambiente está tenso, el rey Melandrach parece no haber dormido en días. La situación de pone tensa pero Lady Silverhand pone orden. Nuevas tareas recaen en los hombros del grupo mientras las facciones defienden los pueblos y ciudades de el norte y más allá.
Un cultista arrepentido podría entregar la Máscara de Dragón Azul a cambio del perdón y los Magos Rojos de Thay podrían ayudar si el grupo los convence.
Deciden comenzar visitando a los Thayinos con la promesa de un pronto retorno utilizando poderosa magia de teleportación. Deciden aceptar la invitación por parte de alguien llamado Nyh Ilmichh. Esa noche son visitados por Leosil que les da algunos documentos que los protegerían siendo ellos enviados diplomáticos y les da algunas advertencias sobre el reino de Thay.
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| Los magos rojos de Thay |
A la mañana siguiente se reunen con Nyh en la embajada de Thay, Sin perder el tiempo el sujeto invoca una poderosa magia de teletransportación y son llevados a las lejanas tierras de Thay, tierras del Liche Szass Tam.
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| Szass Tam |
En cuestión de instantes sus cuerpos se desdoblan e inmediatamente se encuentran en la Fortaleza Nethwatch que se encuentra bajo el comando de la Tharciona Eseldra Yeth del Tarch de Lapendrar.
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| Tharciona Eseldra Yeth, se mantiene joven a pesar de estar gobernando por más de 100 años |
Nyh inmediatamente les asigna lujosas habitaciones individuales y les asegura que el lugar es seguro, que dejen las habitaciones sin llave. Todos son asistidos por sirvientes muertos vivos y se les trae comida y bebida fresca a las habitaciones.
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| Sirviente muerto vivo |
Esa tarde tienen finalmente una entrevista con Eseldra y una docena de magos rojos, aunque sólo la gobernante habla con el grupo haciendo preguntas inquisitivas sobre la información que maneja el grupo, sobre Rath Modar y Tiamat. Aloun es la que se encarga del dialogo y Rosleaw es enviado a sus aposentos por cometer lo que para la anfitriona es una falta de respeto: intenta "detectar muertos vivos". La conversación no se extiende mucho y finalmente son enviados de nuevos las habitaciones individuales sin una conclusión clara de la entrevista.
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| Magos rojos de Thay |
En sus habitaciones se les sirve nuevamente deliciosa comida y se quedan solos con sus pensamientos, Nethras y Aloun, por su ascendencia faérica no sueñan, Rosleaw y Lem tienen extraños sueños que no recuerdan bien, pero Naia sufre una terrible pesadilla en la que interrogada y torturada por los magos rojos. Le preguntan sobre absolutamente todo lo relacionado a Tiamat y los Magos Rojos exiliados que ayudan al culto del dragón y sobre el pasado de sus compañeros de los cuales no sabe mucho por haberse unido hace poco al grupo.
A la mañana siguiente, luego del desayuno se vuelven a encontrar con Nyh y un escolta mago rojo. Tras decirles que la nación de Thay sólo tiene tiempo y recursos para preocuparse por los asuntos dentro de sus fronteras el mago activa inmediatamente un círculo mágico escondido en el piso y son teleportados a una granja abandonada a unas millas de Waterdeep.
Desconcertados por el resultado de los eventos en las tierras al este lejano comienzan a prepararse para viajar a la Torre de Xonthal, un antiguo pueblo lindero a una torre homónima. en la base del Monte Hlim al otro lado del High Moor (Páramo Alto). De nuevo, el hechizo de Lem facilita el viaje.
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En las cercanías de la ciudad Lem frena su hechizo. Ya caminando reciben una carta, un pájaro se frena sobre la nariz del hafling con una nota en su pie, Iskander, el cultista arrepentido advierte sobre el poco tiempo con el que disponen y promete la Máscara de Dragón Azul. Rosleaw y Naia, al ser los únicos humanos avanzan hacia el pueblo mientras los otros hacen un campamento al costado del camino. El aislado pueblo se ve tranquilo y los pueblerinos enseguida identifican a los dos humanos como aventureros. Por un vendedor de frutas descubren que Xonthal había sido un mago, el primero en controlar la magia de todos los continentes de los Reinos y hace un siglo habría echado a sus aprendices, cerrado la torre y conjurado magia en el laberinto de ligustrina que rodea su torre.
Deciden pasar la noche en la habitación de servicio de una taberna ya que por lo poco visitado el pueblo no tiene una posada. Por desgracia el Culto los estaba siguiendo.
El combate es terrible, Nethras, con justificadas sospechas sale a explorar, lamentablemente el culto se infiltraba por el lado opuesto y el elfo tarda en entrar al combate, Fahir es dominado por un sueño profundo y ni siquiera despierta aunque la litera en la que descansa sea convierta en un constructo animado por la nueva magia de Aloun. Lem, envuelto en llamas toma su forma elemental, sin preocuparse por el establecimiento que comienza a arder. Vencen, están heridos y arde el lugar.
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| Lem en su forma elemental de fuego. |
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