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sábado, 17 de octubre de 2020

La Mina Perdida de Phandelver - Sesión 02 (11/10/20)

Tribu  Bocapeñasco

Comienzo a avanzar por el túnel de la izquierda rememorando los túneles de mi antiguo hogar. La diferencia arquitectónica es evidente. ¡Estúpidos goblins! ¡Argh! Los escucho más adelante. Parecen susurrar idioteces y se filtra entre mis bigotes un olor a humo mezclado con cosas rancias... Vuelvo sobre mis pasos y le aviso a mi grupo que hay peligro delante. Galahrin intenta jugarles una treta y avanza entre las sombras pero es descubierto aunque los descerebrados creen que es un enviado de un tal Klarg. 


Galahrin intenta redireccionar el engaño. Parece ágil de mente, tendré que estar atento al tratar con él... si salimos vivos de esta... Intenta hacerse pasar por un enviado de este tal Klarg pero los goblins parecen oler el engaño y se acercan suspicazmente al halfling. Desde su posición Galahrin ve en un entrepiso de la caverna a un humano deshecho, pelado y atado. La mentira parece tener patas cortas, más cortas que las de mi tía, y descubren el engaño. Galahrin rápidamente prende fuego al goblin que se le acercó... el muy perspicaz ya había bañado de aceite el suelo.
¡Asquerosos goblins! No podrán hacernos frente tras lanzar mi hechizo de Perdición sobre ellos. Los disparos de Hessen son certeros, me agrada el sujeto. Oigo silbar las jabalinas del viejo Ferghus que pasan justo encima de mi capacete. Freno un torpe ataque con mi escudo. Esto es juego de niños. ¡Todo se sacude! Una de esas sabandijas cortó mi pierna con su sucios cuchillos. Arg, mi hechizo se disipó. Otro golpe, mi visión se vuelve rojiza...


Despierto buscando a las criaturas verduscas... Todo había pasado. Erevan me había salvado con su magia de sueño aunque me había dormido a mi también en el proceso. Me cuentan que un tal Yeemik estaba a cargo de este pequeño grupo e intentó huir e incluso ofrecer dinero a cambio de matar al otro jefe, a Klarg. Un hachazo de Ferghus y un flechazo de Hessen bastaron para matar al traicionero goblin. En su huida el bastardo había tirado al humano desde el entrepiso. Me acerco para tratar sus heridas... ¡ES SILDAR!. Me apresuro a volver a traerlo a la consciencia. Inmediatamente nos cuenta que a Gundren se lo llevaron al castillo de la tribu Bocapeñasco y con él un mapa. Comienza a hablar de unas antiguas minas en las que gnomos y enanos trabajaron hace cien años tras pactar un acuerdo. La mina se encontraba dentro de la Cueva del Eco que también albergaba poderes mágicos por lo que humanos magos se habían aliado a sus colegas de menor altura. Estaban intentando canalizar magia en la forja de los conjuros con el apoyo de la, ahora renacida, Ciudad de Phandalin. Orcos y magos mercenarios habían llegado del norte y arrasaron con todo, querían hacer con la riqueza y poderes de la mina. Se libró una batalla mágica que derrumbó la mina y su ubicación quedó perdida... ¡Hasta que Gundren la encontró! ¡De eso se trataba todo!
Alianza de los Señores
Sildar, también tenía un trasfondo, es miembro de la Alianza de los Señores, algo así como un consejo de sabios de las ciudades y reinos humanos de la Costa de la Espada y el Norte entre las que se incluyen Puerta de Baldur, Neverwinter e incluso la ciudad de Mirabar, entre tantas otras. Se encontraba buscando a Iarno Albrek, un mago de su grupo, además de ser de su interés que se recupere la mina por lo que ayudaba a Gundren. Según él, Klarg envió al enano y al mapa al jefe de la tribu Bocapeñasco a su castillo. 
Luego de volver al mundo material después de perdernos en las historias de Sildar nos ofrece dinero a cambio de llevarlo a salvo a Phandalin y que terminemos con esta tribu. Tras aceptar despertamos a cachetazos al último goblin para interrogarlo, pero al no sacar nada en limpio le reviento la cabeza con mi maza. Al fin un poco de justicia. Me apronto a tomar un diente de cada uno de ellos como trofeo antes de avanzar por los túneles. 
Erevan toma el frente de la fila y nos lleva hasta el puente que habíamos visto. Intento cruzar cuerpo a tierra pero mi armadura es demasiado ruidosa y nos descubre otro goblin pero Erevan me vuelve a salvar con su rayo congelante. En la siguiente cueva hay una precaria represa. Ferghus encuentra un goblin escondido tras una estalactita y lo patea al agua haciendo que se lo lleve la corriente. Creo que estamos cerca de Klarg...




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