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miércoles, 28 de diciembre de 2022

Exandria - Sesión 16 (18/12/2022)

 Las ruinas de los "Titanes"

¿27 de Fessuran de 836 Post Divergencia?

Nyzel toma la iniciativa y se aproxima al gigantesco guardián. Intenta comunicarse con gestos denotando que su intención es avanzar por el camino. Las reacciones del enorme sujeto son lentas y parece sólo limitarse a seguir al grupo con la mirada. Avanzan sin bajar la guardia dejando al sujeto detrás. Darastrix intenta adelantarse y hacer las veces de batidor, pero el terreno escarpado le evita moverse con comodidad y vuelve a reunirse con el grupo para avanzar a la par. 

Las montañas inexploradas
Un par de horas después de comenzar el ascenso se encuentran avanzando por una cornisa cuando divisan, más adelante en su camino, un par de enormes criaturas bípedas y un enorme animal cuadrúpedo a la distancia. No cubren su presencia y son divisados por estos seres que resultó ser un par de minotauros y un enorme jabalí de pelaje blanco y dimensiones desproporcionadas. Los tres comienzan una carrera violenta hacia el grupo.
Ghost Boar

Frederick es el primer en dar un paso adelante poniéndose a la defensiva. Los mninotauros copian la táctica pero el jabalí avanza a toda prisa alcanzando a Nyzel de un brinco sobre el vacío golpeándolo con sus enormes colmillos. Nyzel retrocede herido y lanza un conjuro de telaraña para frenar a los minotauros. Darastrix esquiva al jabalí, se posiciona y le dispara. Mientras Toga lanza bendiciones en el grupo, una extraña voz sale de la boca de Paighon, "esta vez necesito tomar control sobre ti". Con una retorcida sonrisa el hechicero lanza un conjuro sobre los minotauros envolviéndolos en una bola de oscuridad cacofónica y llena de tentáculos viscosos. She-ra dispara al jabalí mientras Frederick retrocede asqueado por el conjuro de Paighon y también lo ataca. El monstruoso animal intenta devolverle la "gentileza", pero Paighon usa su conjuro para desviar el ataque desde la mente del monstruo. 
Minotauro al ataque
Mientras se concentran en el enorme jabalí, los minotauros se las arreglan para salir de los conjuros que los retenían y avanzan a duras penas unos cuantos metros. Mientras tanto Frederick esquiva un ataque del jabalí mientras éste es golpeado con el látigo mágico de Nyzel. Con la presión de los minotauros Darastrix se reposiciona dando una rol hacia adelante y matando de un certero flechazo al animal que parece desvanecerse al morir. Paighon vuelve a invocar otro conjuro, utiliza su manipulación mágica para imbuir la mente de ambos enemigos haciendo que no reconozcan quién es quién en el campo de batalla y comienzan a pelear entre ellos hasta que sólo uno queda en pie y bastante herido. No tardan en aniquilarlo. Nyzel se toma un rato para extraer algo de sangre y el corazón de un minotauro. Conoce las propiedades que pueden otorgar. 

El terreno es difícil y les impide avanzar a buen ritmo. La noche los agarra desprevenidos y deben acampar sobre terreno montañoso. Toga se toma un tiempo para tratar las heridas de Paighon que, en su guardia, se siente algo observado, perturbado. 

¿28 de Fessuran de 836 Post Divergencia?

El siguiente día los encuentra a media mañana llegando a un altiplano por encima del nivel de las nubes. Ante sus ojos las ruinas de un poblado aparentemente para seres enormes, más grandes que los gigantes. Los bautizan, por el momento, como "titanes". Darastrix toma iniciativa y se cuela en la construcción más próxima. Allí ve el esqueleto de una descomunal figura aún sentada en la mesa con una jarra en mano. Paighon por su lado lanza un conjuro de levitación para otear los alrededores. La ciudad se rige por una ancha calle central con callejuelas que la cruzan. En el lado opuesto de la ciudad, tres enormes edificios distintivos y más allá de la ciudad, balcones labrados en la montaña para la cosecha. Avanzan lentamente por la calle central, los adoquines incluso son una dificultad al paso. En una de las callejuelas ven el esqueleto de otro enorme ser, su cuerpo reposa sobre la pared de una de las casas. 


Megapede
Frederick es sorprendido por tres enormes cienpies monstruosos que hacen juego con las dimensiones de las cosas en este lugar. Los enormes insectos avanzan raudos mientras She-ra abre fuego contra ellos. Nyzel lanza sus rayos debilitadores, Frederick esquiva ataques, Darastrix usa un conjuro mental para repeler a una des las bestias que se le acercaba feroz. Sin darse cuenta Nyzel, She-ra y Paighon quedan alineados y reciben la descarga de un chorro de ácido que les quema la piel. She-ra, Darastrix y Frederick continúan con los ataques físicos mientras Nyzel lanza un conjuro gélido. Segundos después son víctimas de otro chorro de ácido. Los intercambios continúan hasta que el último insecto gigante cae muerto.

Federick continúa con su investigación interrumpida y se mete por al rendija bajo la enorme puerta por la que salieron los insectos. Allí encuentran las paredes forradas de huevos que no tardan en hacer arder. Paighon lanza un sin fin de proyectiles de fuego a la vez que Darastrix usa su magia para controlar las llamas y que no se incendie todo. Investigan el lugar, parece un lugar apto para vivir y por las diferencias asumen que el primer lugar visitado por el kobold era una garita de vigilancia. Frederick se abre paso a los golpes dentro de un cofre de madera y encuentran ropa podrida y reseca y algunos tesoros de tamaño enorme. Un gran cáliz y una daga ornamentada. Nyzel detecta magia en la daga encontrando un gran poder. Paighon copia los detalles en el cáliz, luego desvía su mirada a enorme arma, llevaba engarzada cinco gemas, un diamante, una esmeralda, una piedra onix, un zafiro y un rubí. Propone que alguien intente sincronizarse con el objeto ya que es sabido que los objetos mágicos suelen adaptarse a su portador. Así logran reducir su tamaño por adaptarse a sus manos.

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