Qué tren quetren...
Zor, 19 de Nymm de 998 YK
Jueves, 19 de Junio de 998 YK
Temprano en la mañana preparan la estrategia y se dirigen a la estación. Rusty y Jessica ven a alguien de la casa Orien que parece prestarles atención. El forjado intenta acercarse disimuladamente pero no lo logra y lo pierde de vista. Luego de unas vueltas lo ve tras un ventana hablando con algunos gnomos. Considera que es el momento y lanza su hechizo de localizar objetos pero sin obtener resultados positivos. No hay señales de Lucan. Rusty y Jessica suben al tren y lo atraviesan mientras el forjado vuelve a lanzar su hechizo. Evendur y Gaylord recorren el andén sin ver al supuesto vampiro. Escuchan el último llamado y se suben al vehículo operado por la casa Orien que arranca inmediatamente. Una vez en marcha Rusty vuelve a intentar utilizar su hechizo sin resultados.
Evendur intenta acceder a los vagones del fondo sin obtener permiso. Los guardias de la Casa Orien aseguran que allí no hay nada, que es seguro. Siguen explorando opciones y Evendur trata de utilizar sus sentidos divinos para detectar al no-muerto pero sólo logra incomodar a los pasajeros de los vagones menos lujosos. Jessica insiste en que no viajaría allí. Por su lado Rusty intenta sobornar a un empleado Orien para obtener una lista de pasajeros, pero recibe una fuerte negativa. Jessica comienza a insistirle a un empleado con que está en busca de un terrorista y que incluso trabaja para la embajadora, pero sólo obtiene llamar demasiado la atención. Es noqueada por dos guardias, un humano alto y un enorme semi orco.
Pasado un largo rato Gaylord lanza un hechizo de encontrar objetos para dar con la manopla de plata de Jessica descubriendo que está en el fondo del tren. Es entonces que envía a su familiar roedor a investigar. Los primeros dos vagones bloqueados son de carga, y en el último hay una oficina improvisada en la mitad posterior del vagón donde se encuentra Jessica atada y los dos guardias.
Por temor a que la bajen en la siguiente estación forzando la división del grupo comienzan a debatirse sobre qué hacer.
Gaylord decide actuar. Se acerca al último vagón al que tiene acceso y habla serenamente con el empleado Orien diciendo que la mujer prisionera es su sirvienta y que sufre algunos trastornos que la hacen decir disparates. Todo termina solucionado con una multa de quince piezas de oro. La dificultad para dar con Lucan los empieza a convencer de que realmente está convertido en vampiro por lo que planear actuar de noche, así que Gaylord y Evendur se van a descansar para estar listos por la noche mientras Jessica y Rusty se dirigen al vagón comedor...
Cuando comienza a oscurecer Gaylord explica su plan a Evendur y le pide que se quite la armadura. Una vez despojados de sus vestiduras el mago explica el funcionamiento del hechizo de invisibilidad y qué cosas lo podrían suprimir.
Avanzan invisibles hasta los vagones de primera clase donde, tras hacer ruido y llamar la atención, una cara femenina muy parecida a la de Neya ir'Krell se asoma tras la cortina del vidrio de la puerta de una cabina privada. Esto levanta muchas sospechas y Evendur dice que podría ser Grilsha disfrazada de la embajadora. Mientras debaten el plan, una figura en túnica aparece en el vagón y deja un sobre por debajo de la puerta de forma silenciosa y se retira sin decir ni hacer más nada.
Evendur inmediatamente pide a Gaylord que envíe a su roedor tras el misterioso hombre. Gaylord primero utiliza su hechizo de mano de mago para tomar la carta y leerla. "Encontrame en el comedor, puede hacerte entrar de forma segura a Karrnath", sólo eso decía la carta. Gaylord dice que deben buscar al resto y atacar, pero Evendur se muestra más conservador y prefiere atrapar a todos los involucrados. Entonces el mago toma control de su familiar y persigue al sujeto extraño hasta los vagones del fondo, lo ve lanzar un conjuro en un misterioso cofre enorme aunque no ve el contenido, sí reconoce el hechizo como uno de nigromancia para animar cadáveres. Se apresuran a ese vagón, aún invisibles, y ven justo al extraño sujeto salir del vagón en el que ellos ahora ingresan. El cofre está cerrado pero el olor a podrido confirma las sospechas.
Evendur sigue al sujeto y cuando este se sienta cómodo en su asiente el guerrero divino decide actuar. Se pone frente a él, le tapa la boca y le pone el hacha en el cuello desactivando el hechizo de invisibilidad. Vestido sólo con su yelmo para tapar su rostro el paladín amenaza al sujeto, que a pesar de la situación se muestra algo fanfarrón. Admite que está allí para acabar con Lucan a quién llama alimaña. Dice también no reconocer el nombre de Garrow y que intenta proteger Karrnath. También se muestra esquivo con los no-muertos que Gaylord vio invocar. Evendur le dice que siga su plan entonces, pero que lo vigilará.
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