Eberron - Sesión 22 (15/02/21)

Intrigas a bordo

Zor, 19 de Nymm de 998 YK
Jueves, 19 de Junio de 998 YK

Evendur explica al extraño que lo ayudarán a acabar con Lucan y la que se hace pasar por la embajadora Neya ir'Krell. Esto tranquiliza al extraño.
Por su lado Gaylord intenta adentrarse en el vagón de carga estando aún invisible. Lo logra utilizando a su roedor familiar para distraer al guardia. El ratón se sube por el pantalón del guardia distrayéndolo lo suficiente para que le mago entre sin que el otro vea el abrir y cerrar de la puerta.
Una vez dentro lanza conjuros de luz y sirviente invisible. Este último dentro del cajón sospechoso alertando a los no-muertos que yacen dentro. 

Al levantarse con sus órdenes de defenderse golpean a Gaylord que responde con su varita de enredaderas. Continúa con su llamarada Cannith y manda al ratón en busca de Evendur que llega rápidamente repartiendo golpes con sus hachas de plata. Gaylord asiste al guerrero con sus misiles mágicos terminando con el último zombie. Evendur lo pone al tanto de lo que habló con el sujeto. Acuerdan hablar con Lucan y lanzan los restos de los zombies por los portones laterales del vagón.

El grupo se vuelve a reunir entero y tienen un largo debate sobre cómo accionar. Aún con la carta del extraño en su poder van al vagón de Lucan. Gaylord golpea la puerta y una voz femenina responde preguntando quién llama. Por el ruido del tren no lo pueden confirmar, pero la voz es similar a la de la embajadora.

Jessica intenta abrir la puerta de un patadón pero está trabada. Comienzan a gritar desde el interior llamando a seguridad. Es entonces que Jessica recuerda la ganzúa especial que le dio Rusty.

Ganzúa especial

Cuando finalmente logran entrar ven una ventana abierta y las cortinas flameando por el viento que entra a toda velocidad. Entran y cierran la puerta tras de ellos. Jessica se asoma y ve dos figuras corriendo hacia el campo. Utilizando sus sogas especiales la investigadora se engancha de un árbol y dando una pirueta cae sana y salva. Gaylord utiliza un broche de caída de pluma. Evendur salta cuando ve un cuerpo de agua dónde caer tranquilo con un salto de clavado. Rusty se cruza con los guardias, deja una granada que explota desmadrando todo en el tren y corre rápidamente a la habitación para recuperar todas las pertenencias metiéndolas en el bolso mágico. Tras recuperar todo corre al último vagón e improvisando un explosivo vuela la formación que sale despedida en el aire girando y destrozándose al revotar contra los campos. La explosión es visible por los demás desde lejos. 

Gaylord lanza una bengala de fuego mágica para mostrar su posición. Jessica se coloca los visores mágicos nocturnos y corre tras los prófugos recibiendo algunas quemaduras por los rayos de Grilsha que había podido escapar. Gaylord intenta apresar a la mujer pero recibe de lleno una descarga eléctrica. Vista la situación utiliza su varita de enredar para inhabilitar a la mujer que luego desarma, incluidos sus componentes de conjuro. 

Jessica es tumbada por Lucan y logra esquivar un intento de mordisco. Efectivamente, era un vampiro. Quedan frente a frente combatiendo en campo abierto bajo la lluvia.

A sabiendas del poder del arma de Lucan, la investigadora utiliza sus sedas para arrebatar el arma de las manos de su contrincante, lanzándola por el aire y luego corre a darle dos puñetazos tremendos en el rostro dejándolo aturdido. Mientras tanto una manada de lobos llega al lugar atraída por los poderes nocturnos que Lucan invocó. Rusty golpea a uno y Gaylord mata a otro con su varita de misiles mágicos. Con Grilsha rendida y atada Evendur puede atacar a otro lobo. Mientras tanto Lucan vuelve a ser consciente de su entorno e hipnotiza a Jessica dándole la orden de que huya con él. 

Rusty se hace presente lanzando una granada y Gaylord con su varita de enredar. Jessica, encantada, intenta liberar, engañada por la magia, a Lucan. Evendur sigue repeliendo a los lobos, incluso al ser tumbado. Gaylord lanza una lluvia de proyectiles mágicos. Lucan atrae a Jessica para morderla y
revitalizarse al hincar sus colmillos en su cuello y beber su sangre dejándola tremendamente debilitada. 

Rusty intenta un hechizo de heridas que es resistido por la naturaleza impía de Lucan. Gaylord vuelve a la carga con su varita de enredar pero sólo apresa a Jessica que responde, aún hechizada, con sus sedas pegajosas desarmando al mago de su varita. Evendur intenta usar a Grilsha como rehén, pero Lucan vuelve a morder a Jessica dejándola en un estado calamitoso. 
Es entonces que Gaylord utiliza la varita de luz solar que le suministró Lady E, resultando ser una tremenda arma que centellea en la lluviosa noche. Lucan ordena a Jessica que le busque su espada. Evendur deja de lado la táctica de la rehén y marcando a su enemigo con su poder divino corre contra él cargando con sus hachas. Lucan logra dar un golpe furtivo a Rusty utilizando a Jessica como distracción por lo que el forjado toma la decisión de noquear a su compañera. La lluvia cae pesada sobre los combatientes cuando Gaylord descarga todo el poder de su varita de luz solar y acto seguido Evendur hace lo propio con todo el poder de su castigo divino evaporizando al vampiro cuyas partículas de polvo vuelan en la lluvia.